El Institut lidera la iniciativa Ocean Cities (OC-NET), que tiene como objetivo impulsar unas ciudades costeras más resilientes y hacer más sostenible el modo en el que sus ciudadanos interactúan con el océano.

El Institut de Ciències del Mar (ICM) de Barcelona lidera uno de los tres programas a través de los cuales la Comisión Oceanográfica Intergubernamental de la UNESCO (COI-UNESCO) busca aumentar la resiliencia de los ecosistemas costeros de todo el mundo en el marco de la Década de la Ciencia Oceánica para el Desarrollo Sostenible 2021-2030.
Según el último informe del IPCC, estos ecosistemas son especialmente sensibles a tres factores estrechamente relacionados con el cambio climático: el aumento del nivel del mar, la temperatura y la acidez del océano. Como consecuencia, se espera que experimenten una creciente erosión y sean víctima de importantes inundaciones que pueden tener graves consecuencias para la población asentada en ellos.
Ante este escenario, el ICM se ha comprometido a aumentar la resiliencia de los ecosistemas costeros a través de la iniciativa Ocean Cities (OC-NET), una red internacional de la que forman parte 26 miembros, entre ellos organismos científicos, ministerios, ciudades y organizaciones artísticas, que trabajarán juntos para impulsar una mejor gestión de las ciudades costeras basada en la ciencia y fomentando una ciudadanía más concienciada a la hora de interactuar con los océanos.
El objetivo final del programa es impulsar un funcionamiento más sostenible de las ciudades costeras, que puede alcanzarse desde promoviendo un cambio en los hábitos de consumo diario de la ciudadanía hasta mejorando la planificación urbana y portuaria, y teniendo en cuenta su impacto en las aguas vecinas.
Las otras iniciativas a través de las que la UNESCO pretende aumentar la resiliencia costera a escala global son el Global Estuaries Monitoring Programme, liderado por la Universidad de Hong Kong, y el Mega-Delta Programme, que lidera el Laboratorio de Investigación Costera y Estuarina de la Universidad del Este de China.
Ambas se centrarán en el estudio de la dinámica de los deltas y estuarios, unos ecosistemas que actúan como refugio para muchas especies, protegen la costa y son clave para la pesca y el turismo, entre otros. Por último, a través de estas iniciativas se monitorizará la evolución y se diseñarán estrategias de conservación eficaces para proteger estos hábitats.
En los tres programas, tanto ciudadanos como investigadoras e investigadores y responsables de la toma de decisiones sumaran esfuerzos para que a los sistemas costeros les sea más fácil recuperarse de los impactos derivados del cambio climático.
La Década de la Ciencia Oceánica para el Desarrollo Sostenible 2021-2030 busca fomentar la cooperación internacional en el desarrollo de la investigación científica y la aplicación de tecnologías innovadoras que relacionen las ciencias oceánicas con las necesidades de la sociedad.